Si en mi anterior artículo expliqué aquellas lecciones que aprendí cuando tenía miedo a hablar en público, en esta ocasión te presento un nuevo artículo dedicado al miedo a hablar en público y 5 estrategias para superarlo.
Como podrás apreciar, son estrategias muy concretas, válidas para cualquier persona y para cualquier tipo de presentación que se trate. Vamos con ellas.
5 Estrategias para superar el miedo a hablar en público.
1. La aceptación.
Puede parecer extraña esta estrategia, pero una de las formas más eficientes de superar el miedo a hablar en público consiste en aceptar que uno experimenta ciertas reacciones físicas y cognitivas ante la perspectiva de tener que dirigirse públicamente a otras personas.
¿Por qué es una fórmula altamente eficiente para superar el miedo a hablar en público? Porque al aceptarlo nuestra atención deja de fijarse en las reacciones de ansiedad te tenemos y puede centrarse en aquello que realmente es importante: lo que tenemos que explicar.
Tenemos que recordar que nuestra atención es sumamente limitada. No es muy hábil cuando se divide y tiende a centrarse más en aquellas cuestiones que concurren con una emoción más intensa.
Al asumir como parte del juego el estar nervioso ante la presentación, le restamos importancia al hecho y con ello, curiosamente, rebajamos la ansiedad.
Aunque parezca lo contrario, no existe ningún actor o actriz que no sienta nervios o incluso miedo antes de salir a escena. Muchos de ellos pagarían porque, justo antes de subir el telón, se suspendiese la obra y, sin embargo, utilizan esos nervios para centrarse en lo que tienen que hacer encima del escenario.
Los nervios forman parte del proceso de hablar en público. Asumirlo es un paso excelente para que pierdan relevancia.
2. Que tu presentación esté muy bien estructurada.
Muchas de las personas que tienen miedo a hablar en público fantasean con la idea premonitoria de quedarse en blanco en plena actuación y es, precisamente, esa premonición la que agudiza la ansiedad.
Cuando la persona aprende a estructurar adecuadamente una presentación gana en seguridad porque:
- da orden al pensamiento. Define lo que quiere decir, lo que no y el orden en el que lo quiere expresar. El orden clarifica y da seguridad.
- definir una estructura quiere decir haberla repasado, modificado y vuelto a repasar, por tanto, tiene más posibilidades de haberte quedado fijada en la memoria. Cuando las ideas quedan fijadas en la memoria la seguridad aumenta también porque la persona tiene menos temor a quedarse en blanco.
En general, cuando alguien sabe cómo hacer algo, tiene menos miedo al fallo, por eso es muy importante aprender a estructurar un discurso o una presentación y a argumentar para superar el miedo a hablar en público.
3. Reestructuración cognitiva.
Que nadie se asuste con el nombre de esta estrategia. Reestructuración cognitiva significa modificar el significado que le damos a un hecho y con ello, lo que representa para nosotros.
Como hemos visto, el miedo a hablar en público se produce porque la persona relaciona esta actividad con una serie de consecuencias negativas, en una suerte de causa-efecto que se convierte en bucle.
El trabajo de reestructuración cognitiva consiste en que la persona otorgue un significado diferente al hecho de hablar en público. Por ejemplo, podemos verlo como una oportunidad única para hablar de tu proyecto importante en vez de como un difícil exámen ante un jurado.
Reaccionamos emocional y cognitivamente ante el significado que le damos a las cosas, no ante las cosas en sí. Si logramos cambiiar el significado, cambiamos la reacción.
4. Aprender de memoria el inicio y el final de la presentación.
Sé que no está de moda eso de utilizar la memoria en los discursos, pero es un recurso formidable para algunas personas a la hora de rebajar el miedo a hablar en público.
Ciertamente, no soy partidario de que las personas se aprendan el discurso de memoria palabra por palabra, pero resulta muy efectivo que te aprendas el inicio y el final porque es precisamente al inicio de la presentación cuando más presentes pueden estar los nervios o el miedo a hablar en público.
Saberte el inicio de tu presentación de memoria proporciona seguridad porque no vas a tener la preocupación de quedarte en blanco y vas a darte el tiempo suficiente para calentar motores y meterte en faena. Una vez que han pasado los dos primeros minutos tu mente va a estar más focalizada en lo que estás diciendo y no tanto en cómo están tus nervios.
El aprenderte el final de memoria te va a servir para ganar seguridad en el cierre de tu alocución, una de las partes más importantes de tu discurso. Esta estrategia la recomiendo independientemente de que tengas o no miedo a hablar en público.
Saber finalizar una presentación no siempre es fácil, no se trata de decir ya he terminado y ya está, sino que vas a querer que las últimas palabras que dices sean memorables para tu auditorio. Apréndelo de memoria y te asegurarás de que eso sea así.
5. Ensayar, ensayar, ensayar.
No hay mucho que decir en esta estrategia. En la medida en que ensayes tu presentación vas a ganar en seguridad.
Es una estrategia segura y fácil y, sin embargo, la que menos aprovechan las personas. En unos casos por pereza, en otros casos, no sé bien por qué pero todo el mundo tiene claro que ensayar es útil y muy pocas personas lo hacen.
Tengo que hacer una salvedad acerca de lo que significa y no significa ensayar. Ensayar no es repasar mentalmente el texto de tu presentación o leerlo una y otra vez. Si quieres, eso puede ser un primer paso de tu ensayo, igual que los actores se reúnen para pasar el texto. Siguiendo con el símil de los actores, ensayar es subir a escena y representar la obra hasta que salga como tú quieres que salga. Hazlo y verás como tu seguridad se dispara.
Indudablemente, existen más estrategias que las que acabo de describir, pero estas son algunas de las que mejor resultado dan con mis clientes cuando de lo que se trata es de superar el miedo a hablar en público.
En nuestro mundo profesional es muy probable que, tarde o temprano, tengamos que hablar en público. En muchos casos, de hacerlo o no con solvencia va a depender la valia profesional que nos atribuyan los demás, por eso es de suma importancia que el miedo a hablar en público no suponga un osbtáculo para que puedas mostrarte pleno de competencias.
El miedo a hablar en público se supera y no hay ningún obstáculo que te impida hacerlo. Manos a la obra.
¿Tienes que realizar una presentación, diseñar un curso o en tu empresa necesitáis formación sobre hablar en público o persuasión? Hablemos. Ponte en contacto conmigo.
Óscar Fernández Orellana
Director de Interacción Humana
Psicólogo – Coach, formador,
Consultor de comunicación.
Autor de Así persuaden los líderes.
Profesor del postgrado de Comunicación Persuasiva. Universidad de Barcelona.